Ela Gandhi: una conversación necesaria

Ela Gandhi: una conversación necesaria

Ela Gandhi, nieta de Mahatma Gandhi, sostuvo un encuentro fraterno con profesionales de Caritas Chile, y con académicos, voluntarios, representantes del mundo de la cultura, de diversas creencias.

 
Miércoles 08 de Noviembre de 2017
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En el marco de la visita que realiza a Chile invitada por diversas instituciones que trabajan por el Desarrollo Humano Integral, y por gentileza de Howard Richards miembro del Grupo Repensar la Economía, un grupo de personas de distintas procedencias y actividades tuvieron la oportunidad de conversar con Ela Gandhi.

Como muchos miembros de la familia Gandhi, en la actualidad Ela se cuenta en las primeras filas del movimiento global interreligioso que busca la justicia social. Nacida en Sudáfrica en 1940, estudió en la Universidad de Natal (Durban), después de lo cual se desempeñó en varios servicios de bienestar social.

Por su lucha por la justicia en tiempos del Apartheid en Sudáfrica, a mediados de los ‘70, fue sometida a arresto domiciliario durante nueve años. Fue un actor importante en el proceso de transición de Sudáfrica a un estado post-apartheid participando en el Comité Ejecutivo de Transición en el gobierno de Sudáfrica y, posteriormente como miembro del Parlamento de Sudáfrica. Después de ese período, desarrolló una organización de apoyo a las mujeres que sufren violencia doméstica; fundó y aún preside el Patronato de Desarrollo Gandhi. Ha recibido numerosos reconocimientos por su larga carrera humanitaria, incluyendo el Premio Bhartiya Pravasi y la Comunidad del Premio Internacional de la Pax Christi.

Dirige el Centro Internacional de No Violencia en la Universidad Tecnológica de Durban. Es autora del libro “Gandhi’s Vision of Peace.â€

En la conversación, la señora Gandhi, que ha asumido como una causa difundir y actualizar el legado de Mahatma Gandhi como un aporte a la sociedad actual, presentó una mirada del camino que Gandhi hizo para llegar a las decisiones que tomó. Destacó el rol de su esposa, que encabezó la demanda por el voto femenino en Sudáfrica en 1913, señalando que el aporte de ella ha sido menos relevado que el de su abuelo pero no menos importante.

Desde el camino de Gandhi, Ela señaló la importancia de cambiar la mirada para cambiar el mundo. Desde la igualdad y la libertad que nos entregan nuestras tradiciones y espiritualidades, hacernos cargo de esa libertad y la dignidad de las personas.

En el compartir posterior los participantes elaboraron colectivamente sus preguntas: la economía solidaria, el rol de las políticas públicas para superar la pobreza, la situación de las mujeres estuvieron entre las inquietudes planteadas.

Frente a cada una de ellas, enfatizó en la necesidad de atreverse a cambiar desde dentro. Se requiere una nueva mirada que se atreva a pensar las respuestas desde otros lugares, pero también las voluntades para cambiar desde el Amor y el Respeto. Frente a una manera totalizadora de ver la vida, Ela recupera la necesidad de dialogar y conversar entre los distintos, reconociendo lo sagrado en cada uno.

Su reflexión final sobre el legado de Gandhi es realista y desafiante: “en India hay muchas estatuas de Gandhi pero muy pocos siguen sus pasos, lo que importa es bajarlo del pedestal y hacer vivo su legadoâ€.

Fuente: Pastoral Social Caritas

CECh, 08-11-2017